La próxima organización de la Copa Mundial de Baloncesto Femenino Tenerife 2018 posicionará a la isla como un destino preparado, moderno y de vanguardia, que puede albergar eventos de nivel global como el mayor torneo de baloncesto femenino.
De esta manera, la isla se alza como una referencia en el calendario mundial de eventos deportivos y de relevancia internacional, puesto que se hizo con la sede de la organización del máximo evento baloncestístico mundial frente a otro duro rival, Israel.
La Federación Española de Baloncesto está satisfecha a nivel organizativo y de infraestructuras, lo que reafirma el objetivo de conseguir que esta Copa Mundial de Baloncesto sea la mejor de la historia.
Dos pabellones de nivel
La decimoctava edición del Mundial femenino, se disputará enteramente en la isla de Tenerife con dos sedes, el Santiago Martín de San Cristóbal de la Laguna y el Quico Cabrera de Santa Cruz de Tenerife, donde 16 selecciones pelearán por un trono que parece tener dueño: Estados Unidos.
El pabellón insular Santiago Martín ha recibido una inversión de 339.000 euros para implementar mejoras relacionadas con el saneamiento del parqué, la iluminación y en materia de seguridad. Unas mejoras que se suman a la modernización y acondicionamiento de varias instalaciones deportivas de Tenerife que ayudarán a la práctica deportiva de las competiciones locales y sus correspondientes equipos.
Los 16 equipos están organizados en cuatro grupos: A (Corea, Grecia, Canadá y Francia), B (Australia, Turquía, Argentina y Nigeria), C (Japón, Puerto Rico, Bélgica y España), D (Letonia, Estados Unidos, Senegal y China).
España iniciará el Mundial ante Japón, para luego enfrentarse a Puerto Rico y cerrar la primera fase con el último partido ante Bélgica. El equipo español queda configurado con Laia Palau, Silvia Domínguez, Cristina Ouviña, Anna Cruz, Queralt Casas, Alba Torrens, Marta Xargay, Belén Arrojo, Astou Ndour, Laura Nicholls, Laura Gil y Bea Sánchez.